"La Sophia celeste, la luz de la inteligencia, es la que nos hace ver y comprender las cosas. La Sophia terrestre, la luz de la naturaleza, es la que nos hace obrar y realizar las cosas. La una es el principio, la otra es el fin; la una es la causa, la otra es el efecto; la una es el espíritu, la otra es el cuerpo; la una es el padre, la otra es la madre; la una es el sol, la otra es la luna; la una es el oro, la otra es la plata; la una es el azufre, la otra es el mercurio; la una es el fuego, la otra es el agua; la una es el cielo, la otra es la tierra; la una es el día, la otra es la noche; la una es la vida, la otra es la muerte; la una es el todo, la otra es la nada."
"La Sophia celeste es la que nos enseña el arte de la alquimia, la que nos revela los secretos de la naturaleza y de Dios, la que nos hace partícipes de la ciencia sagrada. La Sophia terrestre es la que nos da el poder de la alquimia, la que nos permite transformar los metales en oro, la que nos hace poseedores de la riqueza universal. La Sophia celeste es la que nos ilumina, la Sophia terrestre es la que nos calienta; la Sophia celeste es la que nos guía, la Sophia terrestre es la que nos sigue; la Sophia celeste es la que nos atrae, la Sophia terrestre es la que nos retiene; la Sophia celeste es la que nos eleva, la Sophia terrestre es la que nos fija; la Sophia celeste es la que nos da la vida, la Sophia terrestre es la que nos conserva la vida."
"La Sophia celeste y la Sophia terrestre son las dos caras de una misma moneda, las dos llaves de un mismo arca, las dos alas de un mismo pájaro, las dos columnas de un mismo templo, las dos esferas de un mismo mundo, las dos mitades de un mismo corazón, las dos esposas de un mismo esposo, las dos madres de un mismo hijo, las dos hermanas de un mismo hermano, las dos amigas de un mismo amigo, las dos amantes de un mismo amante, las dos diosas de un mismo dios."
"La Mater es la madre fecunda, la virgen inmaculada, la esposa fiel, la amante ardiente, la hermana cariñosa, la hija obediente, la nodriza generosa, la esclava sumisa, la reina soberana. Ella es la que da a luz sin dolor, la que alimenta sin cansancio, la que obedece sin resistencia, la que sirve sin queja, la que ama sin celos, la que reina sin orgullo. Ella es la que se somete a todas las pruebas, la que soporta todas las torturas, la que sufre todas las muertes, la que resucita todas las veces. Ella es la que se adapta a todas las circunstancias, la que se conforma con todas las condiciones, la que se acomoda a todos los deseos, la que se satisface con todas las necesidades. Ella es la que se multiplica por todas las combinaciones, la que se divide por todas las operaciones, la que se sublima por todas las elevaciones, la que se fija por todas las coagulaciones."
(FULCANELLI)
Iglesia del Surf del Cristo Risueño de la Costa LTD. MMXXIIII ©
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