"¡Oh, Señor de misericordia y de paz!, permite que ahora nos ocultemos y que desaparezcamos detrás de ti, permite que terminemos tu obra en el secreto y en el reposo antes de que los imbéciles, que dejan morir de miseria a tus hijos inspirados, vengan a felicitarnos y a estrecharnos la mano; antes de que se precipiten avariciosamente sobre lo que siempre se han negado a comprar por un trozo de pan; antes de que se apoderen de nuestra sombra y la expongan en sus espectáculos de circo; antes de que despedacen nuestra vida estúpida y ferozmente, como hacen con los animales para sorprender en ellos el alma."
"Nos retiraremos, pues, de esta nación a la que somos enviado, pero que no nos acepta, a fin de que nuestra predicación no sea un motivo de escándalo o de maldición para nadie, ya que no puede ser un motivo de edificación y de bendición para nadie en ella."
"Si durante tanto tiempo no nos hemos podido ganar la vida con nuestro trabajo, no nos corresponde sentir vergüenza por ello; ésta es para los que nos han excluido y para los que nos han rechazado sin juicio."
"Los artistas, que tendrían que ser los más fraternales y caritativos de los hombres, se han vuelto exclusivistas y malvados; esto no es una buena señal, ya que ahora los incrédulos imperan entre ellos."
"Nuestra prudencia, nuestro silencio y nuestra ausencia serán nuestra salvaguardia ante los que quieren conocer sin estudiar, ver sin creer y juzgar sin amar."
"Ahora, hablamos claramente y nadie escucha, pero cuando todos pregunten,
permaneceremos mudo como un tocón."
(M+R)
Iglesia del Surf del Cristo Risueño de la Costa LTD. MMXXV ©
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